CONVOCATORIA PARA EL TERCER NÚMERO - EL PESIMISMO Y LA CUESTIÓN NACIONAL
Schopenhauer y la política: intentos de manipulación ideológica
En la historia de la filosofía contemporánea, Arthur Schopenhauer se distinguió como un filósofo metafísico y, de igual manera, como el fundador de la ética de la compasión. De ésta se deriva coherentemente un principio de solidaridad universal capaz de extenderse a todo ser susceptible de sufrir. Incluso, el pensamiento del autor de El mundo como voluntad y representación fue sometido a los intentos de politización, descontextualización y, también, reducción en clave nacionalista. Si bien es cierto que el gran sabio de Fráncfort siempre rehusó la arena política y sintió aversión hacia todas las formas de nacionalismo —en particular, el alemán, algunos representantes de la considerada Schopenhauer-Schule intentaron dar un giro en sentido nacional a su pensamiento. Aquellos estuvieron influenciados por el carácter del propio siglo y, más aún, por el deseo de una constitución unitaria del pueblo alemán en una gran nación germánica.
En cambio, la posición de Schopenhauer sobre el judaísmo fue más compleja. Según el maestro del pesimismo, esta confesión religiosa tuvo el agravio de haber introducido el optimismo en el cristianismo primitivo. Sin embargo, para Schopenhauer se trata de una cuestión eminentemente filosófica relacionada con la metafísica y, sin duda, no con la discriminación racial. Esto nos permite comprender —pero, ciertamente, no justifica— la invectiva schopenhaueriana contra la religión judía. Que se trata de un caso de prejuicio filosófico contra la religión judía y no contra los judíos como pueblo, lo atestigua el hecho que, en todo el amplísimo corpus de Schopenhauer, éste no utilizó el término “raza” con relación a los judíos. Además, no hay ningún Juden-Frage en el Werke schopenhaueriano. Finalmente, se sabe que Schopenhauer tuvo entre sus discípulos más cercanos a algunos pensadores de origen judío. Entre ellos, el archievangelista Julius Frauenstädt que fue su confidente y el primer editor de la Werke schopenhaueriana. Wilhelm Gwinner fue su biógrafo y albacea, así como también Carl Georg Bähr, a quien Schopenhauer consideraba uno de sus evangelistas más agudos. Además, entre sus discípulos estuvo el recordado David Asher que intentó en repetidas ocasiones demostrar la convergencia entre la religión judía y la ética schopenhaueriana.
Por el contrario, la postura filosófica de algunos Schopenhauer-Schüler está teñida de matices nacionalistas. En los casos de Eduard von Hartmann y Philipp Mainländer, ambos están influenciados por formas de nacionalsocialismo y tentaciones nacionalistas derivadas, respectivamente, de Hegel y Fichte. Sin embargo, siguen siendo interpretaciones que se distancian abiertamente del pensamiento del sabio de Fráncfort y chocan fuertemente con la ética de la compasión schopenhaueriana.
Cuando Paul Deussen fundó en 1911 la Schopenhauer-Gesellschaft, este gran estudioso de las religiones se preocupó de proteger la obra de Schopenhauer de toda tentación de manipulación ideológica o partidista. Según Deussen, la recién fundada sociedad debe esforzarse «no por una propaganda unilateral», sino por «buscar, en un intercambio de pensamientos, un acuerdo sobre los problemas que la doctrina de Schopenhauer plantea en buena medida al espíritu de las personas pensantes». Por ello, Deussen apela significativamente a «la libertad espiritual con respecto a todas las tradiciones que el genio de Schopenhauer difundió en los círculos cada vez más amplios de nuestra patria y fuera de ella». Por lo tanto, la Schopenhauer-Gesellschaft se fundó bajo la bandera de la libertad, del cosmopolitismo cultural y la compasión universal. No es casualidad que entre sus miembros se enumeren grandes intelectuales pacifistas como el Premio Nobel de Literatura Romain Rolland, filósofos de la talla de Hans Vaihinger, Piero Martinetti, Martin Buber, Max Horkheimer y Norberto Bobbio. También, escritores como Theodor Lessing, Stefan Zweig e Italo Svevo. No olvidemos que, además, la pluma schopenhaueriana inspiró a genios universales como Machado de Assis, Thomas Mann y Jorge Luis Borges.
No obstante, sobre la base de las invectivas de Schopenhauer e inmediatamente después de la muerte de Deussen en 1920, se realiza el primer intento manifiesto de instrumentalización de Schopenhauer por parte de una facción ultranacionalista y antisemita, dirigida por Maria Groener y Jo Weber. El asunto concluyó con la expulsión de Groener y de sus pocos aliados de la Sociedad Internacional fundada por Deussen y por la creación de la autodenominada Neue Deutsche Schopenhauer-Gesellschaft que, a fin de cuentas, no duró mucho ni tampoco realizó ningún aporte científico al estudio del pensamiento de Schopenhauer. Sin embargo, la constitución de la NDSG no será el primer intento de manipulación ideológica de la filosofía de Schopenhauer del que la Schopenhauer-Gesellschaft tendrá que defenderse, entre muchas dificultades, durante los años de la dictadura nazi. Pensemos, por ejemplo, en la interpretación nazi de Schopenhauer por parte de Alfred Rosenberg. Hay que destacar, también, la lectura nacionalista de Richard Wagner, de la que Friedrich Nietzsche se mantuvo distante. El autor de Así habló Zaratustra sufrirá, a su vez, un intento aún más significativo de nazificación de su pensamiento. Debemos considerar que la interpretación de Wagner tendrá un gran seguimiento, no solo en Alemania, durante las dos guerras mundiales.
Finalmente, hay que recordar que, a pesar de la nazificación de las instituciones y la cultura alemana bajo el denominado “Tercer Reich”, la Schopenhauer-Gesellschaft será la única institución cultural alemana que no adoptará nunca el «párrafo ario». La ética de la compasión será siempre un obstáculo para cualquier manipulación nacionalista y racial del pensamiento de Schopenhauer.
Teniendo en cuenta las observaciones anteriores, la presente convocatoria pretende:
- profundizar en la relación entre pesimismo y nacionalismo en la historia del pensamiento contemporáneo;
- investigar la relación entre pesimismo y nacionalismo en la fortuna del pensamiento de Schopenhauer;
- investigar las figuras y los acontecimientos relacionados con el intento de manipulación ideológica de la filosofía de Schopenhauer;
- analizar la relación entre la crítica schopenhaueriana del optimismo y la crítica de la religión judía
- comparar la tendencia cosmopolita del pensamiento schopenhaueriano con su tergiversación nacionalista
Fabio Ciracì
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